Gestión de datos más sencilla
Video Analytics hace mucho más sencilla la gestión de los datos. El usuario puede decidir qué información se debe transmitir. Por ejemplo, puede optar por transmitir el vídeo por streaming solo cuando se mueva un objeto o se active una alarma. Eso reduce sustancialmente la sobrecarga de la red y los requisitos de almacenamiento. Las tecnologías que usan Video Analytics para aumentar la tasa de bits son Intelligent Dynamic Noise Reduction, que reduce el ruido de la imagen antes de la codificación, y la transmisión inteligente, que establece la tasa de bits más eficiente ajustando la configuración del codificador en función del nivel de movimiento.
Escalable y más estable
La inteligencia en origen también puede hacer que una infraestructura de vigilancia sea más estable y fiable. Cada cámara inteligente actúa de un modo independiente, así que no se necesita un servidor de analítica central. Descentralizar la inteligencia de esta manera significa que un sistema se puede ampliar fácilmente añadiendo más cámaras, pero, además, si una cámara falla, el resto del sistema seguirá funcionando.