Detección de llamas e incendios por vídeo de nueva generación

Muchos sistemas de seguridad contra incendios generan demasiadas falsas alarmas porque sus sensores detectan señales de incendio erróneamente. Las alarmas de humo se activan con vapor de agua, otros gases o humo de cigarrillos. Los sensores ópticos pueden confundir colores brillantes con llamas. A veces, todo se debe a errores humanos o retrasos en el mantenimiento. Por ejemplo, la contaminación con polvo o humedad pueden dificultar la eficacia de los detectores. Todas las falsas alarmas que dan lugar a tiempos de inactividad y evacuaciones tienen un coste elevado para las empresas. Además, son peligrosas. Demasiadas falsas alarmas pueden dar lugar a complacencia y a ignorar incendios reales.

Solución 1

• La situación de instalación y la carcasa robusta reducen las necesidades de mantenimiento y aumentan la fiabilidad
• Con AVIOTEC, los operadores pueden verificar las alarmas mediante secuencias de video en directo antes de activar una alarma externa

Cuando se utilizan cámaras de vigilancia convencionales o detectores de incendios basados ​​en vídeo antiguos, la posibilidad de distinguir entre eventos inofensivos e incendios reales depende de la vigilancia humana o de la configuración de algoritmos físicos específicos. Sin embargo, ambos tienen sus límites y, además, muchos sistemas más antiguos solo generan imágenes granuladas, especialmente al aire libre con tiempo nuboso o durante la noche. La humedad, la escarcha y la niebla pueden generar condensación en las lentes de las cámaras, por lo que no se detecta ninguna ignición o combustión lenta lo suficientemente rápido.

Solución 2

• AVIOTEC ofrece una resolución de 4 MP para proporcionar imágenes nítidas incluso en total oscuridad con 0 lux junto con la iluminación IR integrada
• La lente motorizada que se puede configurar fácilmente garantiza que no se pierda ningún detalle

Proteger a personas y activos valiosos para una empresa frente a posibles daños en grandes instalaciones con exigencias de seguridad muy específicas es un gran desafío. A menudo, hay una combinación compleja de edificios antiguos y nuevos con diferentes infraestructuras y tecnologías. Para realizar una monitorización exhaustiva 24x7, sería necesario instalar un sistema de seguridad inteligente y altamente personalizado con todos los accesorios compatibles. Debe detectar al instante cualquier fuente de llamas, humo, chispas y fuego lento. Debe proporcionar fiabilidad a diferentes alturas y ángulos, dentro y alrededor de cada edificio, incluso en la oscuridad total, para que el personal de los servicios de emergencia pueda responder rápidamente con el fin de detener su propagación y evitar la destrucción.

Solución 3

• AVIOTEC ofrece una detección fiable directamente en la fuente en cuestión de segundos
• AVIOTEC viene en una solución todo en uno que incluye carcasa, iluminación IR y soportes de instalación que permiten personalizar el sistema sin accesorios adicionales

Las falsas alarmas pueden ser un problema para los detectores de incendios convencionales que requieren un mantenimiento frecuente. Se podría generar una alerta debido a contaminación en el detector o un fallo del sistema debido a perturbaciones electromagnéticas. El hecho de ser más independiente de estos problemas de mantenimiento puede ahorrar una cantidad enorme de tiempo y recursos. Además, permite continuar la actividad habitual de la empresa, lo que evita los costes e inconvenientes importantes de las paradas en la continuidad del negocio.

Solución 4

• La solución todo en uno AVIOTEC, que incluye una carcasa protectora, reduce los ciclos periódicos de limpieza y mantenimiento
• La detección de sabotajes integrada advierte a tiempo de la contaminación de la lente, de la cubierta de la lente y de la cámara inclinada

Las instalaciones industriales de fabricación o de gestión de residuos con maquinaria y aparatos eléctricos en funcionamiento continuo representan una amenaza constante de sobrecalentamiento. Las sustancias peligrosas, incluidos los residuos que quedan en los recipientes reciclables, pueden ser inflamables o combustibles, lo que aumenta el alto riesgo de que un incendio se propague rápidamente en caso de ignición o explosión. Además, pueden liberar emisiones perjudiciales si se produce un incendio. En función de qué materiales se quemen, el humo puede aparecer de manera prominente como negro azabache o translúcido y, por lo tanto, difícil de identificar para algunos sensores o cámaras.

Las instalaciones de producción dependen de la entrega continua de materiales de fabricación procedentes de los proveedores, con el riesgo de que las empresas o los clientes finales elijan alternativas siempre que haya cuellos de botella. En consecuencia, las empresas de transporte y logística sufren una presión importante para mantener sus centros en movimiento con robots y carretillas elevadoras que cargan mercancías en vehículos para la entrega y palés de almacenamiento listos para su recogida. Las tiendas en línea y los servicios postales también dependen del flujo eficiente de embalaje, apilado, recogida y entrega. Los paquetes apara entrega con contenidos diversos o productos terminados se suelen apilar en estantes elevados en construcciones al aire libre adyacentes a las zonas de procesamiento principales. Esto representa riesgos de exposición a la luz solar intensa y a ráfagas de viento, e incluso una llama leve puede desencadenar un incendio devastador.

Las zonas de aparcamiento suelen ser construcciones semiabiertas de varios pisos. Además de albergar muchos automóviles con motores de combustión cargados de combustible, cada vez hay un número mayor de vehículos eléctricos (EV) estacionados en el lugar. Algunas zonas de estacionamiento también cuentan con puntos de recarga para EV como parte de su infraestructura. Las fuentes eléctricas como estas, la iluminación, las cajas de pago y las barreras automáticas, combinadas con benceno altamente combustible, representan un inmenso riesgo de incendio. En condiciones de ambiente seco, se puede acumular polvo que puede arder si sopla una ráfaga de viento desde el perímetro abierto de la zona de aparcamiento. Los responsables de seguridad deben tomar todas las precauciones para garantizar una reacción instantánea ante cualquier señal de recalentamiento o chispas para evitar una catástrofe.

El movimiento frecuente de cintas transportadoras para equipaje, escaleras elevadas, buggies de aeropuerto y vehículos de reparto corren el riesgo de colisiones en todos los aeropuertos. Todo esto ocurre mientras aviones de distintos tamaños, equipados con fuentes eléctricas, se reabastecen con combustible altamente inflamable y se preparan para los vuelos siguientes. En consecuencia, los riesgos de incendio son extremadamente altos. Incluso un incendio de corta duración exigiría la interrupción parcial de las operaciones para garantizar la seguridad de todo el mundo e investigar el origen y todos los posibles daños. Las aeronaves de alto valor o incluso únicas guardadas en los hangares están en riesgo, especialmente si llevan los depósitos totalmente llenos, si hay combustible almacenado o mientras se realizan operaciones de mantenimiento. Sin embargo, los techos altos hacen que los detectores clásicos funciones de forma poco ineficaz, ya que dependen de que el humo migre hacia ellos para activar una alarma.